Presencia digital: En el contexto de los laboratorios de análisis clínicos, la importancia de un buen posicionamiento digital es cada vez más evidente. Al tratar directamente con la salud de las personas, estos establecimientos se enfrentan a una doble necesidad: destacar para atraer e informar al público, pero también mantener un rigor que garantice la fiabilidad y la ética en la promoción de sus servicios. Sin embargo, la experiencia diaria demuestra que, a pesar de todo el potencial de visibilidad, existen diversos problemas y tensiones que dificultan una presencia efectiva en internet.

1. Sobrecarga de información y dificultad para destacar
Si bien el entorno digital ofrece innumerables oportunidades de expansión, también está saturado de contenido. En nuestro contacto diario con laboratorios de análisis clínicos, hemos observado que muchos tienen dificultades para diferenciarse de otros servicios y portales de salud que publican información sobre síntomas, diagnósticos y tratamientos. El exceso de material disponible implica que el público se ve constantemente bombardeado con datos, muchos de ellos contradictorios o incluso de dudosa procedencia. Como resultado, se genera una sensación de competencia desleal, donde la información cualificada se diluye en un mar de contenido superficial o sensacionalista.
2. Desconfianza pública hacia las cuestiones médicas
En materia de salud, el nivel de exigencia y cautela de las personas aumenta considerablemente. En los laboratorios con los que hablamos, se reciben frecuentes informes de pacientes que llegan llenos de dudas y temores sobre la veracidad de la información recopilada en internet. Esto genera un clima de desconfianza en torno a cualquier contenido en línea relacionado con exámenes clínicos, especialmente cuando no existe una estrategia clara de base científica y un lenguaje apropiado. Esta percepción negativa se ve reforzada por el temor a ser víctima de noticias falsas o a seguir consejos médicos erróneos, lo que pone a los laboratorios en una situación delicada: necesitan comunicarse de forma accesible, pero sin perder el rigor técnico que garantiza la credibilidad.
3. Presión por el cumplimiento y la privacidad de los datos
Otra tensión común se relaciona con las normas que rigen la divulgación de información sanitaria y la protección de datos de los pacientes. En la rutina diaria de los laboratorios, la preocupación por cumplir con leyes específicas, como las relativas a la confidencialidad y la privacidad médicas, genera temor al crear campañas y contenido informativo. La divulgación de imágenes de exámenes, el uso de testimonios de pacientes e incluso la forma de responder a los comentarios en redes sociales plantean dudas sobre la ética y la responsabilidad. A menudo, el miedo a cometer errores hace que el laboratorio pierda oportunidades para una comunicación más abierta y cercana con el público.
4. Falta de consistencia y alineación interna
Un problema muy común en la rutina diaria de los laboratorios es la falta de planificación a largo plazo de sus acciones digitales. Es frecuente encontrar equipos poco integrados, sin directrices claras sobre quién es responsable de crear, aprobar y publicar contenido en redes sociales. Esta desorganización genera publicaciones espaciadas o sin estándares de calidad, lo que, a su vez, transmite una sensación de amateurismo y descuido al público. Además, la falta de un calendario editorial que considere fechas relevantes en el ámbito de la salud, por ejemplo, implica que temas importantes no se abordan en el momento oportuno, desperdiciando el potencial de interacción y credibilidad.
5. Falta de conocimiento sobre métricas y retorno de la inversión
Finalmente, un punto que suele surgir en los informes de laboratorio es la dificultad para supervisar el rendimiento de las acciones digitales y medir los resultados obtenidos. Las publicaciones en redes sociales, las campañas de email marketing e incluso la optimización de sitios web se realizan a ciegas, sin herramientas de análisis adecuadas ni una correcta interpretación de los datos recopilados. Esto impide identificar qué funciona bien o qué debe corregirse, perpetuando inversiones sin un retorno efectivo y perjudicando la percepción del valor del marketing digital para la organización.

El escenario actual exige que los laboratorios de análisis clínicos tengan una presencia consistente y efectiva en las plataformas digitales. Sin embargo, en la práctica diaria, surgen problemas que van desde la saturación de información y la desconfianza del público hasta la presión para el cumplimiento y el reto de medir el éxito de las acciones. Sin soluciones claras a estos obstáculos, muchos laboratorios terminan con una presencia en línea inferior a la deseada, lo que limita su capacidad para informar, acoger y ganarse la confianza de los pacientes, quienes cada vez más buscan apoyo y orientación en internet.
Entender estos obstáculos es el primer paso para construir una estrategia de posicionamiento digital más sólida, relevante y alineada con las necesidades de quienes buscan respuestas confiables sobre exámenes, diagnósticos y salud en general en el entorno virtual.
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Leonardo Lippel
Ejecutivo de cuentas | Greiner Bio-One Service Tech